Tú de natural cómo te definirías ¿conservador o aventurero? Sea
cual sea tu respuesta a esta pregunta, no es nada más que un juicio que emites
sobre ti mismo. Y estos juicios, quizás ya convertidos en creencia, pueden ser
una gran fuente de infelicidad para ti. A lo mejor al terminar esta entrada
tengas otro punto de vista.
Uno de los descubrimientos que más me han gustado de mi formación en coaching es el concepto de distinción lingüística. Yo estoy de acuerdo con la teoría de la ontología del lenguaje que afirma que el lenguaje es generativo, es decir, que la forma en que llamamos a las cosas no sólo las describe sino que crea realidades y nos predispone a la acción en una dirección o en otra.
Lo intentaré explicar con un ejemplo. Muchos de nosotros conocemos a personas que se creen muy generosas, que están intentando complacernos siempre que pueden, pero que no consienten que se les hagan regalos o favores. Ellos siempre tienen que dar, pero no recibir. Posiblemente tienen conceptualizada la palabra generosidad como el acto humano de dar, de compartir lo que yo tengo con otro. Por eso, cuando tú intentas corresponder, no te dejan. No se dan cuenta de que generosidad también es aceptar el regalo del otro, permitirle que disfrute con el acto de quitarme algo yo para que lo tengas tú. Si descubrieran la otra cara de la moneda, la otra interpretación de la palabra, la distinción lingüística, es muy posible que generaran una predisposición mayor a dejarse hacer regalos, sabiendo que eso hace feliz a la otra persona.
Recientemente
mantuve una conversación con una amiga que había perdido su trabajo, como
tantos otros millones de españoles en los últimos años, y se estaba planteando
irse fuera de España a buscar empleo. De pronto me sorprendí a mi mismo con las
palabras que salían de mi boca: “Ciertamente la decisión conservadora ahora, es
salir de España y buscar suerte en otro país”. Parece un contrasentido y decidí
reflexionar sobre el asunto.
De acuerdo
con el diccionario de la lengua española, conservador es:”Dicho
de una persona, de un partido, de un gobierno, etc.: Especialmente favorables a
la continuidad en las formas de vida colectiva y adversas a los cambios bruscos
o radicales”.
A bote pronto, tomar la decisión de abandonar
tu país con destino a otra cultura, otras costumbres, otras comidas,
podría parecer una decisión aventurera y nada conservadora, pero intentemos ir
un poco más allá. ¿Cuáles son tus formas de vida prioritarias? ¿Qué pesa más en
tu día a día? ¿El sentirse independiente, autosuficiente, y desarrollar un
trabajo que te permita vivir dignamente o por el contrario, estar cómodo en tu
ciudad, junto a tus amigos y familiares, esperando la llegada de ese trabajo
que nunca aparece y viendo cómo consumes tu prestación por desempleo, tus
ahorros o la paciencia de los seres queridos que te ayudan a llegar a fin de mes?
Filete de res magallánica relleno de centolla con papas gratinadas y verduras en salsa de vino Merlot |
Por mi experiencia, la adaptación a la cultura
y las personas chilenas es fácil y sin comparación con lo que sería en otros
destinos asiáticos o incluso en la vieja Europa. Esto no quiere decir que con
tomar la decisión de saltar el charco, esté todo resuelto. En Chile hay mercado
de trabajo en determinados sectores de la industria y mejores oportunidades
cuanta mayor capacitación, experiencia o estudios tengas. Por el contrario, en
otras ramas menos especializadas, hay mucha competencia y salarios bajos sin
que puedas contar con la sanidad y educación pública que tenemos en España.
Mi reflexión no pretende convencer a nadie de
que tome la decisión en un sentido o en otro. Sólo me gustaría pensar sobre
nuestros procesos de toma de decisiones. ¿Cómo me veo a mi mismo? ¿Soy conservador o aventurero?
¿Qué significado tiene para mí ser conservador? ¿Y aventurero? ¿Cuáles son las
cosas verdaderamente importantes en mi vida?
En muchas ocasiones nos hemos formado una idea
de nosotros mismos que nos limita y que no nos permite explorar otras
posibilidades. La forma en que nos hablamos abre o cierra puertas de manera
inconsciente. De tanto decirme que soy conservador, llega un momento en el que
me lo termino creyendo y me impide contemplar
todas las oportunidades que tengo delante. “Con mi mentalidad
conservadora, ¿cómo me voy a plantear irme a Chile?” O, por el contrario, “como
yo soy de natural aventurero, me voy a Chile a buscar trabajo de dependiente en
una tienda”.
Cualquiera que sea la decisión que tomes, podrá
salir bien o mal, pero lo importante es tomarla de acuerdo con tus valores y
tus convicciones y con todo aquello que sea importante para ti. Tanto si te
sale mal como si te sale bien, habrás conseguido lo que el profesor del MIT,
Fred Kofman en su libro “Metamanagement” llama “el éxito más allá del éxito”, o
dicho resumido, hiciste lo que creías que tenías que hacer de acuerdo a tus
principios. Según Kofman este éxito genera una paz interior y una felicidad
incondicionales, porque el comportamiento no depende de factores
incontrolables. Aunque el resultado no sea lo que uno quería, siempre es
posible experimentar la serenidad profunda de saber que uno ha hecho lo mejor
que pudo para enfrentar la situación con dignidad. El profesor cita un libro
sagrado del hinduismo para ilustrar su lección: “Tienes derecho a tu acción,
pero no el derecho a los frutos de tu acción”
Por mi parte me gustaría terminar mi reflexión
con lo que escribió un sabio hace 2.500 años, más o menos:
“El alma queda teñida del color de tus
pensamientos. Piensa sólo en aquellas cosas coherentes con tus principios y que
puedan soportar la más intensa luz del día. El contenido de tu carácter es tu
elección. Día a día, lo que eliges, lo que piensas y lo que haces es en quien
te conviertes. Tu integridad es tu destino…es la luz que guía tu camino”.
Heráclito de Éfeso.
Feliz día y que tengáis éxito en todas vuestras
decisiones.
Un like! (manito con dedo pulgar hacia arriba)
ResponderEliminarGracias, Anónimo.
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ResponderEliminarDa gusto tener lectores tan atentos! Gracias a ti por tus palabras.
EliminarMe parecen muy acertadas tus reflexiones, las comparto al 100%. un saludo y gracias,
ResponderEliminar¡Gracias Clara! Mucha suerte en todas tus aventuras.
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ResponderEliminarUna persona con estudios de técnico superior de sistemas de telecomunicación e informáticos en chile cual seria su expectativa de trabajo? Seria muy difícil conseguirlo allí??
ResponderEliminarNo puedo darte una respuesta muy precisa. ¿Hay trabajo de ese sector en Chile? Creo que si. ¿Te gustaría vivir en Chile? ¿Te adaptarías al país? ¿Te gustaría la vida allí con el sueldo que pudieras ganar? ¿Qué pierdes probando? Las respuestas sólo las tienes tú.
EliminarHola! Acabo de tropezar con tu blog, y me resulta muy interesante. Soy Ingeniera Agrónoma del área de la Industria de alimentos. Estoy pensando en emigrar a Chile, dada la dificultad que es para los jóvenes con poca experiencia encontrar un hueco en el mundo laboral en España. He mandado ya varias solicitudes de empleo a Chile y no he obtenido respuesta de ninguna. ¿Sabes como está el sector allí? ¿Tu experiencia es que se acaba encontrando trabajo relativamente pronto?¿Puede ser que no presten atención a solicitudes de gente que reside en España? Mil gracias, un saludo!!!
ResponderEliminarMe alegro de que te gusten mis reflexiones. Respecto a tu pregunta, y por mi experiencia, es prácticamente imposible irse con trabajo amarrado a Chile. La opción realista es invertir una cantidad de dinero e ir a buscarte la vida allá, con los deberes hechos acá. Aquí, legalizando título, haciendo contactos,... Tu sector está creciendo mucho en Chile y le veo con muchas posibilidades: vitivinícola, piscifactorías, frutas, carne...Pero todo pasa por ir allí, opino. Si quieres más info, mándame un mensaje. Feliz día.
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